CARTAGENA DE INDIAS
Tomamos un autobús de Santa Marta hasta CARTAGENA y otro colectivo (una pequeña combi) a la zona del hotel. Llegamos a un buen lugar, tv, baño, clima, justo en frente de un centro nocturno de dudosa reputación, una tiendita donde vendían pan recién hecho para Daniel y raspados de fruta para mí, Pasamos ahí 2 noches y luego nos movieron a otro lugar cerca porque estaban haciendo arreglos de electricidad en la cuadra, la tercera noche que pasamos en Cartagena se fue la luz, fue una de las peores del viaje, Daniel porque moría de calor y durmió (o al menos trató) en el balcón que daba a la calle, mientras a mí me empezó a molestar una muela (es lo peor) al día siguiente nos tocaba mudar nuestras cosas e irnos al otro hostal.
Lo que realmente aprovechamos fue un desayuno buffet de cereal, leche, fruta y jugos, siempre jugos tan ricos que a veces pedíamos un poco más durante el día, definitivamente esos días debimos subir unos cuantos kilos, realmente desayunábamos mucho.
Del hotel podíamos ir caminando al centro histórico o CIUDAD AMURALLADA Cartagena tiene historia pirata ya que hubo muchos ataques provenientes de piratas de Europa por lo que puedes encontrar tours y cenas especiales en barcos tipo Pirata, pasas por el Camellón de los mártires para después llegar a su gran centro, es tan bonito, con mujeres en sus trajes típicos con las que por algunos pesos te puedes tomar una foto (siempre debes dar propina) las calles empedradas, los pequeños balcones y casa pintadas de colores llamativos, las iglesias, los puestos de fruta y dulces típicos, panaderías, cafeterías; en realidad tiene mucho encanto sumándole sus carrosas con caballos en los que puedes dar un paseo recorriendo las calles, también tiene su toque moderno con sus boutiques de diseñador, hay muchos restaurantes elegantes en los que puedes cenar, nosotros no cenamos ahí pero los vimos de lejos mientras disfrutábamos nuestra arepa de carne comprada por una pequeña cantidad de dinero.
Puedes visitar el CASTILLO SAN FELIPE por aprox $8USD, que es una fortificación que sirvió de defensa contra los constates ataques de ingleses y españoles, es un tour que vale muchísimo la pena.
Tomando un colectivo puedes ir a la zona “nueva” en donde tuvimos que hacer una parada técnica con el dentista, después paramos en un Mc Donalds para comer y por un tradicional cono (en el viaje comía mínimo un cono cada dos o tres días) caminamos un rato por la playa en donde nos sentamos a tomarnos una cerveza, recorrimos sus calles y llegamos a un centro comercial para dar la vuelta, esa zona está llena de restaurantes, bares y hoteles, es totalmente diferente a Getsemaní que es el barrio donde nos hospedamos, y que en lo personal nos ha gustado más, ya que es más auténtico, dejamos Cartagena esperando volver para tomar nuestro vuelo para el próximo destino.
