SANTA MARTA
¡A la playa! Decidimos tomar un vuelo a Santa Marta. El viaje por tierra hubiera sido muy largo, Santa Marta es una ciudad como cualquiera de playa, no hemos pasado tanto tiempo recorriéndola, tiene una iglesia blanca muy bonita en donde puedes encontrar puestos en los que por unos pesos comprabas una buena porción de fruta, no se nos ha hecho tan especial (quizá teniendo dinero lo hubiéramos disfrutado mas jaja). Eso sí, muy caluroso y húmedo con un malecón muy bonito paramos en FEDEX para hacer un envío y de ahí tomamos una pequeña combi que nos llevaría a Taganga que está a unos 15 min. de distancia



TAGANGA
Un pequeño pueblo playero muy bonito, relajado, con muchos viajeros, con unos atardeceres espectaculares (porque en la playa siempre son especiales) en la orilla de la playa puedes ver a los pescadores limpiando la pesca del día, Daniel disfruto mucho el clima de la habitación ya que no puede vivir sin aire acondicionado compramos verduras y pescado y preparamos ceviche, paseamos por las noches donde puedes encontrar pequeños bares y puestos de turistas que venden artesanías (si alguien te pone una pulcerita en la mano y te dice que es de regalo, mentira, deberás darle algunas monedas) Ahí tomábamos cheve en la calle (caguamas por lo general) María se compraba sus raspados de frutas con leche condensada (la mejor combinación que existe) la pasamos muy bien, nosotros recomendamos pasar mas tiempo en Taganga que en Santa Marta, tiene cierto encanto que seguro te gustara.
Una lugar con ambiente muy hippie y vida. Hasta pronto Taganga!





