MEDELLÍN
Tomamos el autobús de Bogotá a Medellín el cual tomó más tiempo de lo estimado, te recomendamos revisar los horarios en la página www.redbus.co. La carretera tiene muy bonitos paisajes y aunque nos levantaron con música en punto de las 7am llegamos mucho después a la central, fue una odisea encontrar el hostal, caminamos mucho con las mochilas y si le sumamos el calor fue super cansados, pero finalmente llegamos a www.hostaltamarindo.com (al llegar nos dimos cuenta que estuvimos dando vueltas y estaba justo en frente de nosotros) era como una casa bonita, moderna y limpia, teníamos buena tv, baño y cocina comunitaria. Medellín es muy bonito, justo en frente de nuestro hostal había una plaza en donde se reúne mucha gente a comer y platicar.
Paseando por el centro puedes encontrar puestos de todo tipo, mucha gente en las calles, personas que se dedican a pasar documentos a maquina a cambio de dinero, boleros, comida, en fin, hay tantas cosas que no tendrás tiempo de aburrirte. Después de caminar un rato decidimos ir al pueblito paisa es un pequeño lugar que muestra la arquitectura de pueblos tradicionales de Antioquia en la cima del cerro de Nutibara, subes por unas escaleras (algo cansadas pero con muy bonita vista con toda la naturaleza que lo rodea) ahí puedes pasear un rato comprar algo de comer y ¿Por qué no? una cerveza Águila ahí nos tomamos la primera de las muchas cervezas que probaríamos durante el viaje a Sudamérica (y claro, tenía que ser una caguama).
Dejamos Medellín, una ciudad que es mucho mas que una serie de Netflix y un pasado complicado, es una ciudad bonita, ordenada y con mucha vida. nos ha gustado un montón y seguro recomendamos visitarla.
Visitamos la plaza de las Botero que nos sorprendió con esculturas gigantes de bronce donadas por Fernando Botero, la visita es un imperdible si estas en Medellín, esta justo en frente del Museo de Antioquia, el más importante de la ciudad, así que puedes aprovechar para hacer ambas visitas.
Nos tocó algo de lluvia y clima fresco algunos días lo cual le daba el toque especial.
El metro también es muy eficiente e incluye un trayecto en teleférico al cual le llaman metro cable (Daniel no lo disfruto muchísimo por aquello de la altura). Visitamos también un jardín botánico y un mariposario donde Daniel cautivo a una mariposa que por más que la espantábamos no lo dejaba.
Tomamos un tour a el Peñón de Guatapé un monolito de 220 metros de altura, debes subir 740 escalones para llegar a la cima y al llegar es impresionante la vista, en la cima hay pequeños restaurantes en donde te puedes comprar una cerveza, agua y disfrutar un rato antes del regreso, sin duda es un lugar que tienes que visitar si estas en Medellín, no te vas a arrepentir.
Se encuentra a sólo dos horas de Medellín por lo que puedes dedicar un día a la visita.
